martes, 22 de diciembre de 2009

It´s Oscar time!!! - Mejor director

Pasemos a la categoría de mejor director, que ha sido a veces discutida por parecer una reiteración de la categoría de Mejor Película. Si el director es el último responsable del resultado final de una película (y en las películas que optan a premio suele serlo), no tiene sentido que una u otra decisión difieran. Pero sí que tiene sentido por una de las características distintivas de los Oscar frente a los premios de festivales o de la crítica: la Recompensa a la Carrera. De acuerdo, ya existen Oscar honoríficos (que este año, en una decisión discutidísima y que intenta por enésima vez recortar la duración de la ceremonia, se han entregado ya en una ceremonia paralela), pero eso es el premio de consolación: lo que a los Oscar (y afrontémoslo, a la comunidad cinéfila) les pone es otorgar premios a los actores o directores de amplia y prestigiosa carrera que nunca han sido premiados. Y aunque a veces ese reconocimiento llega en la cima de su carrera (Clint Eastwood), las más de las ocasiones se recompensan trabajos inferiores a los que les hicieron grandes (Al Pacino y "Esencia de mujer", Martin Scorsese e "Infiltrados", Judi Dench y la broma de premiarla por cuatro minutos de "Shakespeare in love"...). Al mismo tiempo, si te dan el Oscar de joven, puedes olvidarte de él hasta la senectud. Y es un factor fundamental: Tom Hanks las tenía todas para ganar en "Náufrago": la película era él (literalmente), había engordado una barbaridad de kilos (10 puntos Oscar) y, por si fuera poco, su interpretación era impresionante, la cima de su carrera sin duda. Pero !ay!, ya tenía dos Oscar, y además en años consecutivos, por lo que no era posible.Por lo tanto, los directores que opten a este premio saldrán del grupo de diez elegidas a Mejor Película (y si esto no se cumple y alguien apuesta por ello se podrá retirar), pero cuales serán tendrá tanto que ver con la fuerza de sus películas como con su historial. Estos son los favoritos:


- Jason Reitman, "Up in the air": Es el director de la candidata más fuerte a día de hoy, por lo que debería ser el favorito, pero está a la par con el segundo candidato. Su carrera hasta ahora es inmaculada: una ópera prima tan polémica como brillante("Gracias por fumar"), una segunda película que no sólo evitó el bajón tan habitual para los cineastas jóvenes en su segundo esfuerzo sino que lo consagró como un director comercial sin necesidad de dejar su acidez de lado ("Juno") y esta tercera película en la que se une al campeón de las causas nobles versión USA para reflexionar sobre el capitalismo. Es joven, es simpático, es de buena familia ("Los cazafantasmas", dirigida por su padre, tiene una increíble fama entre la crítica del otro lado del Atlántico. Y cuando digo increíble quiero decir que me niego a creerlo)... debería ganar. Pero...



- Kathryn Bigelow, "The hurt locker": ... esta es la mujer que más cerca está de ganar el primer Oscar para una directora.(Inciso hetero-cougar: !!!¿¿¿ esta mujer tiene 59 años!!!???, quiero el número de su cirujano plástico). Su carrera es muchísimo más irregular y discreta que la de su contrincante: los que la apreciamos debemos reconocer que nos ha ofrecido hasta ahora una más que correcta película de vampiros ("Los viajeros de la noche"), un intenso thriller sobre la atracción por las armas ("Acero azul")... y destellos. Lo que pasa que alguno de esos destellos son brillantísimos: los atracos de "Le llaman Bodhi", la secuencia inicial de "Días extraños", el climax de "K-19"... Esta mujer siempre se ha sentido más cómoda con las secuencias de acción que con las de diálogo, con el movimiento de los cuerpos antes que el de los labios, y ha tenido que hacer una película estructurada en torno a seis o siete set-pieces para alcanzar al fin su obra redonda. Lo que le
resta su irregular carrera se lo suma su condición de mujer (será solamente la cuarta nominada en toda la historia de los premios). Sus rivales serán Reitman y su ex-marido, que no es otro que...

- James Cameron: "Avatar" es una incógnita. A día de hoy, puede arrasar en los premios como hizo "Titanic" o ser arrinconada como "E.T.". De hecho, no considero a Cameron un fijo en esta categoría, aunque alcanza este tercer lugar porque si alcanza la nominación es uno de los que puede ganar. Hablábamos antes del historial: Cameron ya lo ganó todo, y recordamos que no fue un ejemplo de deportividad y savoir-faire al ganarlo (¿"Soy el rey del mundo"?, sí, vale, pero solo le faltó agitar el Oscar frente a la nariz de Curtis Hanson mientras le sacaba la lengua). La Academia se puede mostrar remisa a ver de nuevo este número, además de lo poco que la ciencia ficción suele gustar aquí. Dependerá de que la respuesta comercial esté al menos a la altura de las enormes expectativas (los Oscar no dependen de las recaudaciones, pero son un factor importante; esto no es Cannes...) y de que la película sepa conectar con el pùblico de la Academia, que no es su público objetivo. Pero que nadie dude que puede ser "Titanic 2".



- Quentin Tarantino - "Malditos bastardos": Tarantino no es nominado desde hace quince años, y debemos reconocer que su carrera no ha estado a la altura de las expectativas que despertó. El que se le reconozca por su última película es positivo, a ver si se centra y se deja de homenajes, revivals, absurdos trabajos como actor y demás. Si se le podan las tonterías (que tiene unas cuantas), este es su mejor trabajo desde "Jackie Brown". No tiene posibilidades de ganar: esperarán a que sea favorito para hacer una coronación en toda regla como hicieron con Spielberg.

- Clint Eastwood- "Invictus": un nuevo año, una nueva nominación. ¿Qué se puede decir de la carrera de Clint que no se haya dicho ya?. Pues nada.(Bueno, que tampoco ganará este año, pero que le da igual. Y a nosotros)









Tienen posibilidades:

- Lee Daniels- "Precious": tiene toda la pinta de quedarse fuera. Es desconocido y la atención de su película está demasiado centrada en sus actrices. Además, parece que la película está perdiendo potencia en este momento de la carrera.

- Rob Marshall, "Nine": como dijimos, la película cotiza a la baja. Además, ya fue relegado cuando "Chicago" ganó: no tiene demasiado cartel.

- Los hermanos Coen, "A serious man": demasiado cerca su victoria. Y su película es poco comercial.

- Neil Blomgkamp - "Distrito 9": puede ser la sorpresa, su película es muy valorada entre la crítica. El hecho de que sea de ciencia ficción juega en su contra.

- Spike Jonze - "Donde viven los monstruos": uno de los favoritos de la crítica, su película es demasiado diferente para la Academia, aunque de vez en cuando se ponen espléndidos y reconocen con una nominación estos esfuerzos ("Lynch por "Mullholland Drive", Schnabel y "La escafandra y la mariposa"). Quizás sea el que tenga más posibilidades de colarse, y colaría así a su película entre las diez.

Seguiremos con los actores.

domingo, 20 de diciembre de 2009

It´s Oscar time!!! - Mejor película (Parte 2)

Segunda entrega de nuestro examen de los principales favoritos para ser nominados a la categoría de Mejor Película en Inglés de la 82º edición de los Premios de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos (o sea, los Oscars, vamos). Como avanzamos en el anterior post, este año hay diez puestos para Mejor Película, lo que paradójicamente hace que sea más fácil predecirlos que en años anteriores (por lo menos, eso parece...). Dimos ya los seis favoritos: pasemos ahora a examinar los aspirantes a cubrir los cuatro puestos restantes, como siempre en orden de más a menos posibilidades:


- "Up": Como siempre por estas fechas, los interesados en estas movidas piden y suplican la introducción de la película anual de Pixar entre los elegidos a Mejor Película.No sería la primera vez (Disney lo consiguió en 1991 con "La bella y la bestia"), pero !ay! hace 18 años no existía la categoría de Mejor Película de Animación. No existe ninguna regla que impida la doble nominación, es cierto, pero las peculiares nociones de justicia distributiva de los miembros de la Academia (parte fundamentalísima de los premios y originadora de la práctica totalidad de las sorpresas) han evitado hasta ahora que se haga doblete. La ampliación a diez candidaturas, unida al descomunal éxito crítico y comercial de la película, hace que Pixar lo tenga más a mano que nunca. Y ¿alguien podría dudar de la justicia de la nominación?. Pixar ha hecho más por la supervivencia y mejora del cine, en los aspectos industrial, comercial y artístico, que ninguna otra productora en los últimos cincuenta años. Sus diez películas hasta la fecha oscilan entre lo simplemente magnífico hasta la obra maestra sin paliativos. Merecen estar aquí, y merecerían ganar, pero eso va a ser otro año.



- "Nine": ¿Recordáis cuando en el anterior post hablábamos de Oscar movie gone wrong, como "Alejandro Magno"?. Una de las que no citamos fue "Dreamgirls", que quería ser "Chicago" y estuvo a punto de ser "Paso decisivo" (si no entiendes esta chanza, probablemente este no es tu post...). "Nine" debería ser la película Oscar por excelencia de este año: seis actores ganadores de un Oscar en el reparto (cinco de ellos en los últimos diez años), dirigida por el director de la propia "Chicago", distribuida por The Weinstein Co. (y por lo tanto con el brutal lobbying de Harvey Weinstein detrás, que merecería no un post, sino un blog para él solo), basada tanto en la mítica película "Ocho y medio de Fellini" (ganadora de dos Oscar) como en el exitoso musical "Nine" (ganador de cinco Tony, los Oscar de Broadway)... todo aquí grita "Oscar!!!"... y sin embargo le va a pasar lo que a "Dreamgirls": nada de nominación al director o a los protagonistas, y con suerte se colarán Penélope y su inexplicable prestigio estadounidense en la categoría de Mejor Actriz Secundaria. ¿Qué ha pasado?, ¿qué falló?... pues algo que a los que seguimos esta carrera nos parece tan marciano como natural le parecerá a los demás: la pelicula no gusta. No gusta a la crítica y el público no parece entusiamado. Y ya está. En un mundillo tan profesionalizado, con tanta pasta gastada, tantas fiestas de promoción, tanta gente dedicada a empujar a su producto, el simple hecho de que una película sea mala puede tirar abajo las esperanzas de sus promotores. ¡¡Cuanta injusticia!!. Entre lo malo, le ha venido a ver la Virgen, porque este año serán diez las nominadas y se colará, pero nada más.

- "A Serious Man": Como todo, Harvey no tiene mucho de que quejarse este año, porque los Bastardos le van a dar varias alegrías y tiene otra película que últimamente apunta fuerte a colarse entre las diez mejores (aunque ya estamos en territorio pantanoso y no lo tiene ni mucho menos asegurado). Los hermanos Coen son los niños bonitos de la crítica norteamericana (más aún que de la europea), y de hecho también de la Academia: según las pocas y difusas filtraciones que se producen sobre las películas que se quedan a las puertas de la nominación cada año, prácticamente todas las películas de los Bros. habrían sido nominadas si hubiera habido diez nominaciones cada año. Esta teoría se pondrá a prueba este año, porque "A serious man",
según se cuenta, es una de las película menos mainstream de su carrera: no sólo por el hecho de que no tenga actores conocidos en su reparto (y no digo con esto que no tenga estrellas: es que no los conoce ni Cristo), sino porque las crónicas reflejan éxodos de espectadores en los pases comerciales, como si fuera una peli de Lynch. Los que se quedan la adoran, por supuesto, pero esto nunca ha colado con la Academia. El apoyo sin fisuras de la crítica la mete en la carrera: veremos si llega.

- "An Education": nuestra favorita para el décimo puesto es un ejemplo perfecto de película que sale demasiado pronto y llega cansada a la recta final. Desde el verano se lleva comentando que una de las fijas para este año es esta pequeña película inglesa que arrasó en Sundance, la historia de la llegada a la madurez de una joven de provincias a través de su relación con un hombre mayor. Sin embargo, ha perdido fuerza de tal manera que su única nominación a los Globos de Oro ha sido para su protagonista, Carey Mulligan (que sí llegará a la nominación). Nos alegraría la nominación porque su guionista, el novel en esas lides Nick Hornby, es uno de los Santos Patrones de este blog (si no has leido "Alta fidelidad" deja de leer esto y ponte a ello). Aun así, no nos jugaríamos pasta.


- El resto: para los puesto noveno a décimo hay variados aspirantes, que divideremos en tres grupos:




- Oscar movies gone wrong: A "The lovely bones" le pasa lo mismo que a "Nine": teniendo a un Peter Jackson tras la cámara y a gente como Susan Sarandon y Rachel Weisz delante, siendo una adaptación de "Desde mi cielo", un libro tan popular como para-cristiano, debería ser una de las favoritas. Pero no gusta, así que deberá esperar a ver si se cuela aquí o en mejor actriz para una muy alabada Saorsie Ronan (¿la próxima Kate Winslet para la Academia?). Algo parecido se puede decir de "The road", aunque aquí el problema es mucho más comercial que crítico. Y es normal: o te cargas la obra maestra de Cormac McCarthy o te va a salir la película más deprimente desde "La tumba de las libélulas" (el que no la conozca que corra a por ella, que estoy deseoso de que la gente comparta mi sufrimiento), y una regla de oro de la Academia es "Triste sí - Deprimente no". Viggo tiene una chance como mejor actor, pero también escasita. Finalmente, escasas probabilidades para "The messenger", drama sobre los encargados de notificar a los familiares la muerte de los soldados americanos en Irak que tiene en su contra el factor Irak y el factor deprimente. Seguramente se tenga que conformar con Woody Harrelson para mejor actor secundario.

- Crowd-pleasers: con esta expresión se describen aquellas películas que, sin contar normalmente con el apoyo de la crítica, son adorados por el público y viven una larga vida en DVD e innumerables pases televisivos. Un ejemplo sería "Cadena perpetua", que desde una carrera comercial discreta y un ninguneo de la Academia ha pasado a ser una de las películas mejor consideradas por el público (de hecho, hace nada ha sobrepasado en la lista de mejores películas de la historia de IMDb al eterno nº1, "El padrino", lo que hasta un rendido admirador como yo considera que es pasarse varios pueblos). Este año la mejor colocada en este grupo es "The blind side", que tiene muchos puntos a su favor: es una película sobre fútbol americano, que allí gustan mucho; tiene a Sandra Bullock en su reparto, que tras diez años perdida ha vuelto a
arrasar en taquilla este año, y los comebacks gustan más a los académicos que una cena gratis; y es una historia real (bonus, 10 puntos Oscar!!!) parecida a la de "Precious" pero contada de modo mucho más amable (lo que le quita de apoyo crítico se lo da de voto gerontológico). Además, se ha estrenado en el momento justo. Ojito con ella, que como se cuele va a tener un bloque de votos importante que puede hacer que sea el sorpresón final. Otra película que puede dar la sorpresa es "It´s complicated", comedia con Meryl Streep y los co-presentadores de la gala de este año, Steve Martin y Alec Baldwin, que está ganando momentum y puede sacar una cabeza al resto.

- Ciencia ficción: Aún se puede oír el eco de los aullidos que lanzaron los fanáticos de "El caballero oscuro" cuando fue excluida del quinteto final el año pasado. Con diez nominadas hubiera entrado seguro, pero este año no hay ningún blockbuster fantástico con su prestigio y calidad. Las única películas que tienen muy delgadas posibilidades de entrar son "Star Trek", que curiosamente está muy bien considerada entre la crítica americana y ha entrado en alguno de los Top Ten que se desvelan en esta época, y "Distrito 9", que estando en el mismo caso se comprende mejor. En ambos casos juega en su contra su género y sobre todo su fecha de estreno: muchas veces la ausencia de películas comerciales en los Oscar tiene más que ver con la frágil memoria de los académicos (y no es una metáfora: recordemos la edad media de los académicos) que con prejuicios trasnochados.

Pues estas son las predicciones para la categoría mayor. Próximamente, actores y director.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

It´s Oscar time!!!! - Mejor película (Parte 1)

Con el anuncio de las nominaciones para los Globos de Oro comienza oficialmente la temporada de premios en Estados Unidos, si bien ya se han concedido numerosos premios de la crítica de las asociaciones de Boston, Nueva York, etc. En esta edición la novedad consiste en que se ha aumentado el número de películas nominadas a 10, con lo que se sigue en cierto sentido la tendencia marcada por los antedichos Globos de Oro, aunque con una salvedad: los Globos nominan a cinco películas dramáticas y cinco comedias o musicales, mientras que los premios de la Academia no harán dicha distinción. Esto hará que seguramente entre las diez nominadas exista un mayor número de películas dramáticas (que ya se sabe que son más "premiables", que no necesariamente mejores). Las consecuencias de esta discutida novedad serán seguramente menores, en el sentido de que, al no aumentar los candidatos en premios de actuación, de guión o de dirección, las películas que alcancen uno de los diez puestos pero no tengan representación importante en el resto no tendrán apenas posibilidades de premio. La probable razón de esta modificación es, como todo lo que rodea a estos premios, comercial: poder colocar en letras grandes en el cartel "NOMINADA A MEJOR PELICULA - OSCAR" añade un 10-15% mínimo a la recaudación final de una película (bueno, a "Avatar" no, pero ni falta que le hará). Y es que bussines is bussines... pero como en el fondo a algunos nos gusta, vamos a dedicar una serie de entregas a analizar las posibilidades de las diferentes películas que este año optan a los premios.

Comenzaremos por el premio gordo: Mejor Película de Habla Inglesa. Como decíamos al pricipio, este año hay diez candidaturas, por lo que será relativamente fácil preveer seis o siete puestos con casi total seguridad, pero sí que existe la posibilidad de que uno o dos "intrusos" se cuelen en la fiesta. Por orden de seguridad en la nominación:

- "Up in the air": la nueva película de Jason Reitman ("Gracias por fumar", "Juno") es la película Oscar de este año, aunque ello no le garantiza la victoria. Por película Oscar me refiero a la película que se presenta comercialmente con el nada disimulado objetivo de arrasar en los premios: festivales, boca-oreja (que no boca a boca, que eso es una técnica de reanimación) constante, estrella con prestigio al frente (George Clooney) y un tema: en este caso, la historia de un experto en gestión de personal que atraviesa Estados Unidos constantemente despidiendo a gente (recesión, inestabilidad, que malas son las empresas y todo eso tan de moda hoy en día). A veces estas operaciones salen bien ("Gandhi", "Una mente maravillosa", "No hay pais para viejos") y a veces salen fatal ("El talento de Mr. Ripley", "Alejandro Magno", "Cinderella Man"; mal en el sentido de que no rasquen bola en los premios, no que sean malas -que algunas también-). Esta tiene buena pinta: habrá que verla.






- "The hurt locker": estrenada hace ya meses en Estados Unidos (a ver cuando en España, y a ver como traducen el título, que es difícil, difícil), esta película sobre un artificiero del ejército americano en Irak es la campeona de la crítica este año. Varios datos pesan en su contra: las películas de guerra en Estados Unidos sólo triunfan si la guerra terminó hace varios años (pasó con Vietnam y está pasando con Irak), se estrenó demasiado pronto para la frágil memoria de la gerontocracia de los Oscars y sus estrellas (Guy Pearce y Ralph Fiennes) pasan por la pantalla en un suspiro (quince minutos entre los dos). A pesar de eso, todos los premios de la crítica y los Globos de Oro la homenajean, y con razón: esta es la gran película que algunos siempre pensamos que Kathryn Bigelow tenía dentro. Estará seguro, y si alguno de sus actores es nominado será señal de que es un aspirante a todo.






- "Malditos bastardos": en una mesa redonda con varios aspirantes a la nominación (enlace aquí), Tarantino reconoce que, si bien se ha sentido muchos años como un outsider del sistema, ahora ya es un insider, y la Academia lo va a reafirmar este año. Su película es tan irregular como toda su filmografía, pero contiene dos o tres escenas que rozan la maestría. Alguno de sus actores tienen la nominación asegurada, algunas de sus actrices la merecería. Brad Pitt no, aunque sin él en el cartel nunca existiría esta película. ¿Para cuando un Oscar al "Mejor conseguidor", dirigido a estrellas que permiten que proyectos arriesgados vean la luz?. Sería la única manera de que Jim Carrey consiguiera un Oscar...








- "Precious": la pequeña-independiente-arriesgada-minoritaria-etc-etc de este año. La historia de una adolescente negra, obesa, analfabeta, víctima de abusos.... ¿debo seguir?. Más allá de la calidad de la película, que analizaremos cuando la veamos, es obvio que sólo por su argumento tiene todas las papeletas para tener unas cuantas nominaciones. Y tener a Oprah Winfrey de máxima valedora no hace más que asegurar su aparición. Otra cosa es ganar (aunque... ¿alguien ha dicho "Crash"?)











- "Invictus": Clint Eastwood dirige a Morgan Freeman interpretando a Nelson Mandela. Repito: Clint Eastwood dirige a Morgan Freeman interpretando a Nelson Mandela. ¿Entendido?
















- "Avatar": la megasupercolosal película en 3-D del megalómano Cameron era la gran incógnita de este año. Digo era porque la babeante reacción de la crítica americana ha hecho que pase a ser una de las fijas y, dependiendo de lo que guste al público, una de las máximas candidatas al premio. Su problema puede estar en la ya mentada gerontocracia de la Academia. "Titanic" coló porque la mayoría de los votantes había leído lo del naufragio en los periódicos, pero tanta pantalla verde y tanto FX puede ser demasiado para el sector carroza. De todas maneras, cuando la veamos ampliaremos opinión.





Próximamente las candidatas a cubrir los cuatro puestos vacantes. Ah!, y para los que sepáis inglés y os interese esto, Awards Daily, sin ninguna duda la mejor página sobre este rollo.

jueves, 22 de octubre de 2009

Saw 16 (o sea, Saw-X-VI)

La noticia en el mundo del cine de los últimos días (y de las próximas semanas, a juzgar por los comentarios que se oyen) es la decisión de la Comisión Calificatoria del Ministerio de Cultura de otorgar una calificación "X" a la sexta entrega de la serie "Saw", que debía haberse estrenado este viernes. Y digo debía porque esa decisión supone de facto su prohibición, dado que solamente existen hoy en día ocho salas X en España, y sin las condiciones necesarias para estrenar una película comercial. Varias reflexiones sobre esta cuestión:


- La tal Comisión Calificatoria recuerda poderosísimamente a la Motion Picture Association of America que tan bien se describía en "This film is not yet rated" (2006), documental-guerrilla a la Michael Moore en la que se descubría la opacidad, venalidad y falta de democracia de la tal comisión y su tendencia a "perdonar" la violencia antes que el sexo o la mala palabra. En España ha ocurrido lo contrario, pero todo lo que escucho sobre la Comisión (personajes monaguillescos, opacidad absoluta, falta de motivación de las decisiones) recuerda lo que se describía en esa película (a la que, por supuesto, se quiso censurar).

- No olvidemos que el informe de esa comisión NO es vinculante, y que la última decisión corresponde al presidente del Instituto de la Cinematografía y las Artes Visuales, Ignasi Guardans, que me extrañaría mucho que hubiera tomado esta decisión sin consultarlo con la Ministra que lo ha traído, Angeles González-Sinde. Esto es una decisión política, lo que no significa per se que sea mala o buena, simplemente que es una decisión con un calado mayor que el estreno o no de una película.

- Disney estará de los nervios: por un lado, les hunden la fuerte campaña de promoción que habían montado. Por otro, les ofrecen gratis otra campaña que ni siquiera ellos hubieran podido pagar. Pero para aprovechar esta última tienen que provocar que se revierta esta decisión lo antes posible, por lo que estarán ahora mismo haciendo lobby como si les fuera la vida en ello.

- Finalmente, lo más importante: esta es la demostración de lo absurdo que es el sistema de calificación por edades español. De facto, hay dos calificaciones: X o no-X. ¿Por qué?, porque lo demás son recomendaciones que ni sirven para nada ni hay manera de aplicar. Dado que las salas X son anexos a sex-shops que presumo poco recomendables, la conclusión es que en España no existe un sistema de calificación de películas que pueda impedir o dificultar que un chaval de 8 años vea "Anticristo", "Hostel" o las películas de Larry Clark si le da por ahí, pero sí que se puede prohibir el estreno de una película si al director del ICAA se lo parece. O sea, lo mejor de ambos mundos. No descarto que esto haya sido una explosión controlada para plantear el cambio de regulación, pero si ha sido así es una nueva muestra de que los que se encargan de la comunicación en el Gobierno deberían ser incomunicados. Permanentemente.

Por cierto, no he visto "Saw II" y siguientes; no me haría gracia que mi (hipotético) hijo de doce años fuera a verla; y sé que si un sistema diferente le impidiera entrar en la sala tardaría 3,4 segundos en descargarla y verla sin que yo me enterara. Es complicado. Así que no creo que sea una cuestión que se solucione gritando "Censura!!!!" o "Libertad!!!".


miércoles, 1 de julio de 2009

Pues a mi me gusta!!! - 3.2 - ¿Qué les pasa a los hombres?: La película en sí misma considerada

SUPER SPOILER ALERT - A partir de aquí destriparemos una película que no se estrenará en España hasta septiembre, y que he podido ver porque.... un amigo me ha traído una copia en DVD desde EEUU (ejem). Así que he avisado....







Como decíamos, "¿Qué les pasa a los hombres?" está basada en un libro de autoayuda, titulado en España "¿De verdad está tan loco por tí?", traducción aproximada de "He´s not that into you". Merece la pena que describamos el origen de este título: el co-autor Greg Behrendt (de hecho el principal autor; Liz Tuccillo actúa como simple contrapunto) trabajaba como consultor en "Sexo en Nueva York" (serie que también tiene bastante de chick flick pese a su aparente "feminismo de tercera ola") cuando en una escena escribió esta frase para que uno de los personajes masculinos explicara a Miranda que el hombre con el que salía no estaba enviándole mensajes cruzados: simplemente no estaba tan interesado en ella (que sería la traducción más fiel del original). Partiendo de esta frase, el redactor del libro (hablamos de un libro de autoayuda: llamarlo "autor" o "escritor" parece un poco fuera de lugar) intenta explicar a sus potenciales lectoras que cuando un hombre no muestra inequívocamente su interés en una relación con ellas, no existe tal interés. Su tesis es que los hombres, en general, saben lo que quieren y no tienen un especial miedo al compromiso: a lo que tienen pánico es a decirle a una mujer que no están interesados en comprometerse
con ella. O sea, que la cobardía masculina existe, pero no exactamente como la pintan las chick flick (o sea, como oligofrenia emocional masculina, con perdón de los oligofrénicos). Por lo tanto, no hay que interpretar las señales: si un hombre no expresa claramente su interés por una mujer, es que ese interés no existe y simplemente no se atreve a decirlo, y prefiere no contestar las llamadas, mentir, y demás canalladas que se asocian habitualmente a la natural iniquidad masculina del siglo XXI. Por resumir, la respuesta a la pregunta "¿Qué les pasa a los hombres?" sería "Que no les gustas y no se atreven a decírtelo".

Esto es un torpedo en la línea de flotación de las chick flick y las comedias románticas. Todas ellas se basan en la suposición de que los hombre se
hacen los difíciles para comprometerse porque... son hombres. Pero tras un tira y afloja, unas llantinas y con la ayuda de tus amigas, terminan en el altar. Porque te quieren. Entonces, si llegamos a la conclusión de que los hombres o bien te quieren , lo dicen y se casan contigo sin más drama, o bien no te quieren y por eso no te lo dicen... pues las chick flick tendrían que pasar a ser cortometrajes o acabar mal. Y la primera opción es la más plausible en este caso...

¿Qué hacemos con esto? ¿Como conjuramos el peligro?, que nos jugamos mucha pasta fácil... Pues compramos el libro y nos basamos en él para hacer una película que diga exactamente lo contrario. No quiero ser dramático con esto, pues los autores han colaborado encantados y tampoco es que se hayan cargado "El animal moribundo" de Roth (esa fue la Coixet), pero nos hallamos ante una de las adaptaciones menos fieles de la historia, y no porque se hayan utilizado libérrimamente los consejos y casos "reales" que se cuentan en el libro para elaborar una trama convencional (solución original de cómo adaptar un libro de autoayuda, por otro lado), sino porque se utiliza para llegar a conclusiones opuestas a las del original.

Al lío. Baltimore, EEUU: tres amigas trabajan juntas (nunca se nos dice en qué; sabemos que están en una oficina). Son Jennifer Connelly, Jennifer Aniston y Ginnifer Goodwin. La primera está casada con Bradley Cooper; la segunda tiene una relación desde hace años con Ben Affleck que éste se niega a legalizar; y la tercera sigue en el
dating game con poca suerte, pues los hombres que le gustan, como Kevin Connolly, no le llaman tras la primera cita.

Kevin Connolly tiene un amigo, Justin Long, que dirige un bar y ejerce de
womanizer sin coartadas ni engaños. Cuando la Goodwin llega a su bar esperando hacerse la encontradiza con Connolly, Long la conoce y, viendo sus dificultades con los hombres, la "adopta", enseñándole a partir de ese momento a reconocer las señales de que un tío no está por tí (actuando como alter ego del autor en cierto sentido).

Connolly también tiene una amiga con derecho a roce (aunque poco roce), Scarlett Johansson. Esta se encuentra con Cooper en un supermercado y, tras las rituales reticencias de hombre casado, comenzan una aventura.

Finalmente, la Aniston, tras llegar a la conclusión de que Affleck no se va a casar con ella nunca, lo deja, pese a reconocer que es una pareja maravillosa.

(Nota: este es un código chick flick bastante habitual. Hay dos tipos de "Hombres que no quieren casarse": el tipo 1, que engaña a su novia, la trata como basura y claramente la tiene para el polvo ocasional si no aparece algo mejor, y el tipo 2, que es fiel, atento, colabora en las tareas del hogar pero no quiere casarse. Si al tipo 2 lo llamaran "hombre que no quiere tener hijos" todo estaría mucho más claro, pero debe ser un tabú de Hollywood o algo así)

También hay otra
subplot protagonizada por Drew Barrymorre, pero sólo sirve para comprobar que, asombrosamente, la Barrymorre es cada día peor actriz (tiene mérito, el listón está muy bajo) Corramos un tupido velo.

El desarrollo de las tramas no tiene demasiadas sorpresas: si acaso la confesión espontánea de Cooper de su infidelidad sin motivo aparente (más allá de su debilidad) y el retrato curiosamente amable del personaje de Long (un picaflor honesto y sin complejos que no engaña a nadie). Pero las sorpresas vienen con el (aparente) desenlace:

La Goodwin, como es lógico en un personaje que parece el retrato robot de las amantes del chick flick (de hecho, utiliza como guía amorosa "Una maravilla con clase" (1985, Howard Deutch), que es un cruce entre chick flick y comedia-adolescente-de-John-Hughes), comienza a ver señales por todas partes en su relación con Long, y pese a las evidencias en contra (como coqueteos descarados con otras mujeres) literalmente se le tira encima. Obviamente, él escapa y comprueba estupefacto que todo lo que le ha dicho a la Goodwin ha pasado de oreja a oreja sin escala intermedia y que como ella le espeta que como cree en el amor, al final lo encontrará por mucho que por el camino haga la imbécil, y en cambio como él no cree en el amor (¿?¿?¿) terminará solo.

Esta escena, bastante desagradable de ver para los que nos afecta la verguenza ajena, sería el perfecto colofón para la historia de esta chica que no es mala persona, pero le han metido en la cabeza demasiados pajaritos. Pero es que después de esto, varias escenas que si fueran en blanco y negro y habladas en ruso no parecerían más pegote hacen que Long se dé cuenta de que la quiere, deje de dormir y comer por ella y finalmente suplique su perdón y la preñe casi de inmediato (que el reloj biológico avanza). O sea, no un pajarito, un pajarraco.

En cuanto al resto de las tramas, algo similar: la Connelly deja a su marido, pero no porque la engañe, sino porque !!fuma a escondias!! (vale, tal y como está narrado tiene cierta lógica, pero no deja de tener coña); la Aniston, tras convivir unos días con sus cuñados y compararlos con Affleck (que !friega platos!, !!cuelga cuadros!!, !!!está mucho más cachondo que sus cuñados!!!) decide transigir y volver con él, aunque ello signifique renunciar al matrimonio (recordad: =hijos) Una decisión difícil, pero tan madura como intolerable en una chick flick (que transijan ellos, el mundo debe ser poblado!!!!), que obviamente es solucionado con otro pegote de calaña similar al anterior en el que Affleck cae de la burra porque sí y se casan, vaya si se casan. Finalmente, Johansson decide dar una oportunidad a Connolly y este tarda dos días en comprar una casa tamaño familia numerosa y proponerle matrimonio, pero ella decide renunciar a "todo con lo que cualquier chica sueña" (toma ya!!!) porque en el fondo no le quiere. Y termina sola (porque Scarlett es demasiado
hot como para terminar casada en este género. Las chicas sexualmente agresivas siempre terminan solas)

Como vemos, no hallamos ante una chick flick que lo es porque se le han pegado diez minutos finales que parecen sacados de otra película. ¿Ha existido remontaje por parte de la productora? Sinceramente, no lo creo. Tanto Kwapis como Behrendt llevan demasiado tiempo trabajando en este género como para saber que los finales
lógicos que hemos descrito no son aceptables. Por lo tanto, se puede asumir que han filmado y escrito la chapuza de manera tan grosera a propósito. Si seguimos elucubrando, se podría pensar que lo han hecho para reirse de su público objetivo, de su falta de criterio, de sus inmensas tragaderas para todo lo que contribuya a un final feliz que le haga pensar que para ellas también habrá un final feliz. Que, en el fondo, esta sí que es la chick flick que acabará con todas las chick flicks.

Bien, espero haber demostrado con este coñazo que se puede escribir una crítica sesuda de
cualquier cosa. Si has llegado hasta aquí, mis felicitaciones y mi agradecimiento. Continuaremos con la película a la que nadie hizo caso del director que un año después hizo la película de la que todo el mundo hablaba, y todo eso con ochenta y tantos años. ¿Adivináis cual es?, y ¿adivináis cual me gusta más?

Pues a mi me gusta!!! - 3.1 - ¿Qué les pasa a los hombres?: Introducción



Ya he dicho en anteriores entradas que las rom-com van a tener un papel destacado en esta sección. En este caso vamos a examinar detenidamente una de las más recientes películas de este género, de hecho perteneciente a un sub-género más reciente y de un interés sociológico colosal: las chick-flick.

El género chick-flick se puede entender de manera amplia o precisa. En cuanto a la manera amplia, aquí hay una lista de películas chick-flick que engloba prácticamente todas las películas de los últimos veinte años cuyo nombre más destacado en el cartel es femenino. Es un criterior, pero me parece un poco vago. También se puede (y se suele) decir que son películas "dirigidas a un público femenino". Vale. ¿Y eso qué significa? ¿Se prohibe la entradan de los hombres al cine? ¿Se anuncian principalmente en los servicios de señoras?. Si lo que se quiere decir es que son películas que son vistas mayoritariamente por mujeres, eso se podría aplicar a todo el género de comedia romántica y melodrama. Intentemos enumerar una serie de características de este sub-género:

1.- La película debe estar protagonizada por una (o varias) mujeres. El personaje femenino debe ser el centro de la trama y su parte "activa", es decir, debe tomar decisiones que hagan avanzar la misma.

2.- Debe existir una mezcla de géneros, habitualmente comedia y melodrama. Lo más habitual es que la película comience en un tono ligero para posteriormente deslizarse hacia lo lacrimógeno (dicho sea sin intención peyorativa: a mí me encanta llorar en el cine)

3.- La película debe ser "relationship-based" ( me encantan estos palabros yankis): es decir, la trama debe versar principalmente sobre el nacimiento-evolución-fin de una o varias relaciones, bien sean sentimentales o de amistad (vale, en el fondo TODAS las películas van sobre relaciones humanas, pero estaréis conmigo en que no tienen la misma relevancia en "La jungla 4.0" que en "Tomates verdes fritos")

4.- El enfoque es principalmente post-feminista en su sentido más básico y reductor: es decir, las(s) protagonista(s) será una mujer independiente, con una carrera profesional, pero que lucha por tener un compromiso sentimental estable. De hecho, el eslogan de las mayoría de estas películas podría ser "en busca del compromiso masculino".

De acuerdo con estas premisas, la lista se estrecha considerablemente. Las películas fundacionales de este género son "Eternamente amigas" (1988, Garry Marshall) y "Magnolias de acero" (1989, Herbert Ross), que tienen en común su condición de sleepers en taquilla y la abrumadora superioridad de las espectadoras femeninas sobre los espectadores masculinos. Este, como otros muchos, es un género construido por motivos comerciales: "si hacemos películas con ciertas características, nos costará poco dinero y ganaremos mucho". Posteriormente, dos mega éxitos como "Pretty Woman (1990, Garry Marshall; ey, otra vez por aquí) y "Ghost" (1991, Jerry Zucker) , que sin ser chick flicks propiamente dichas comparten la característica 4 (ejemplos de compromiso masculino: un millonario que se casa con una puta porque ella quiere el cuento de hadas y un marido que vuelve de la muerte para estar con su mujer) demostraron el potencial tirón de este tipo de producciones.

Ejemplos posteriores son, sin ánimo de exhaustividad, "Tomates verdes fritos" (1992, Jon Avnet), "Donde reside el amor" (1995, Jocelyn Moorehouse), "Esperando un respiro" (1995, Forest Whitaker), "El diario de Bridget Jones" (2001, Sharon Maguire) y su secuela, "El diario de Bridget Jones: Sobreviviré" (Beeban Kidron, 2004), "El clan Ya-Ya"(Callie Khouri, 2002), "Uno para todas" (2005, Ken Kwapis) o "27 vestidos" (2008, Anne Fletcher).

Como podrá comprobar el interesado por el tema, casi todas estas películas son adaptaciones de libros de éxito (en muchos casos de inesperado éxito). Y también lo es la película que vamos a examinar después de esta agotadora (pero espero que útil) introducción: "¿Qué les pasa a los hombres?" (2009, Ken Kwapis)


La novedad es que en este caso el libro en el que está basado "QPH" es un libro de autoayuda. Y no sólo eso: es un libro de autoayuda dirigido a las mujeres que han visto demasiadas chick flicks y están dispuestas a aguantar carros y carretas porque los hombres, al final de la peli, se dan cuenta de que las quieren y se casan con ellas. Y las ayuda diciendo que todo eso son chorradas y que si un hombre está interesado en ellas, lo mostrará a las claras, y si no, es que no vale la pena.


Y eso lo coge Hollywood y hace con él una chick-flick. Y una de libro de texto. ¿Y como lo hace? Pues haciendo trampas, por supuesto.

Continuará...



viernes, 26 de junio de 2009

Revisitando los clásicos - 1.- Muerte entre las flores

Tengo la sensación de que en lo que se refiere a la carrera de los hermanos Coen voy a contracorriente: "Sangre fácil", "Fargo" y "El gran Lebowski", sin parecerme en absoluto malas películas, me dejan bastante frío, mientras que "El gran salto", "Intolerable crueldad" y "The Ladykillers" me despiertan una enorme simpatía, reconociendo que todas ellas son fallidas en mayor o menor grado. En cuanto a "No es país para viejos", aún no sé si me gusta o no: la sombra de la novela de Cormac McCarthy es tan alargada que me impide valorarla. Lo único que tengo claro respecto a la filmografía de los Coen es que nunca harán algo tan bueno como "Muerte entre las flores".


La idea detrás de esta película es tan espléndida como peligrosa: adaptar a Dashiell Hammett partiendo a la vez de todas sus novelas y de ninguna. Es decir, hacer un guión que saquee a gusto "La llave de cristal" y "Cosecha roja" y tome prestados diálogos de multitud de novelas y cuentos de Hammett, pero que a la vez cuente una historia nueva con nuevos personajes. La dificultad de realizar semejante pirueta llevó a los hermanos a tal bloqueo creativo que inspiró "Barton Fink", que de hecho escribieron en tres semanas de "descanso" que se tomaron de la escritura de este guión.

El casting de la película fue extremadamente azaroso, ya que dos de los principales actores entraron en la película de rebote: Trey Wilson (el Nathan Arizona de "Arizona baby"), que debía interpretar al
boss irlandés Leo O´Bannon, murió de un derrame cerebral apenas dos días antes del comienzo del rodaje, con lo que tuvieron que buscar un reemplazo de urgencia, que resultó ser nada menos que Albert Finney. Asimismo, Peter Stormare no pudo interpretar el papel de "El Sueco", el segundo de Johnny Caspar, con lo que el papel pasó a J.E. Freeman, cambiando asimismo de nombre para pasar a ser "El Danés". El resto del reparto se cubrió con Gabriel Byrne interpretando al indiscutible protagonista Tom Reagan, una debutante Marcia Gay Harden como Verna Bernbaum y una serie de actores que pasarían a formar parte de la la troupe de los Coen: Jon Polito, John Turturro y, en un pequeño papel, Steve Buscemi. Finalmente, en pequeños cameos se puede distinguir a Sam Raimi (como el policía que ejecuta a un infeliz en un asalto a un local irlandés para ser inmediatamente ametrallado) y Frances McDormand (como la recepcionista del alcalde)

Esta película está tan cerca de la perfección como se puede estar. No sólo soporta varias visiones, sino que las recompensa, puesto que existen infinidad de pequeños detalles a descubrir y a disfrutar: la maravillosa pareja de matones que forman Mike Starr y Al Mancini, el inmenso hijo de Jon Polito, la excepcional set-piece del tiroteo en casa de Leo... Sin embargo, el mayor placer es adentrarse en la riqueza y complejidad de un guión excepcional. En ocasiones se ha tildado a la película de tramposa, y es cierto que en un análisis superficial puede parecerlo. Voy a intentar desmentirlo ofreciendo mi intepretación de la película. Obviamente, esto va a ser un MAJOR SPOILER, o sea que si alguien que está leyendo no ha visto la película, le recomiendo que se haga el favor de su vida y la vea antes de seguir leyendo.


Ya?


Vamos. El principal punto de discusión en cuanto al guión de la película es la relación entre el personaje de Tom Reagan y Bernie Bernbaum. Algunos opinan que, si Reagan tiene todo el plan en su cabeza desde el principio, no tiene sentido que tenga tanto miedo que llegue a vomitar en su segunda visita al bosque. Y tienen razón. Mi teoría es que Reagan tiene un plan, pero lo cambia sobre la marcha por amor.

Comencemos desde el pricipio: Tom Reagan es el
consiglieri (o similar) de Leo O´Bannon, el jefe del gang irlandés de una ciudad norteamericana en la época de la Prohibición. O´Bannon controla la ciudad, dando órdenes tanto a alcalde y jefe de policía como al resto de bandas, principalmente al jefe de la Mafia local, Johnny Caspar. La película comienza precisamente como una petición de Caspar a O´Bannon: el permiso para eliminar a Bernie Bernbaum, un corredor de apuestas que le está timando en su cara. Pese a la lógica de la petición (lógica dentro del mundillo criminal, claro), Leo se niega. Posteriormente sabremos que la razón de esta negativa es que Bernie es el hermano de Verna, la joven amante de Leo, que adora a su hermano. Tom intenta convencer a Leo de que autorice la ejecución para evitar una guerra con Caspar, que ambiciona una excusa para desplazar a Leo; todo ello a pesar que Tom también es amante clandestino de Verna, y pese a las apariencias está enamorado de ella.

Desde el principio, Tom comprende que la obcecación de Leo le llevará al desastre. Mi teoría es que su primer plan incluye confesar su
affaire con Verna a Leo para romper públicamente con él y lograr a su vez que rompa con Verna, escenificar su alianza con Caspar delatando a Bernie para que sea eliminado y una vez ganada su confianza lograr la caída en desgracia del Danés, que sabe que es la cabeza de Caspar así como él es la de Leo. Para ello, utilizaría el útil dato de que El Danés y Bernie comparten amante, Mink (el personaje de Steve Buscemi), convenciendo a Caspar de que El Danés le ha traicionado. Una vez eliminado el Danés, nada más fácil que arrastrar a Caspar a su caída devolviendo a Leo el poder, para dejar la ciudad con Vera.

El plan se tuerce en la visita al bosque, no por casualidad escena cenital de la película. Caspar ordena a sus matones que obliguen a Reagan a ejecutar
él mismo a Bernie. El patético paseo por el bosque, en el que Bernie llora y suplica por su vida, muestra a Reagan verdaderamente inquieto por primera vez en la película. La razón obvia sería el rechazo a la violencia de Reagan, que le hace insoportable ejecutar a un ser humano; sin embargo, de acuerdo con la evolución final del personaje, la única conclusión lógica es que Reagan está inquieto porque sabe que Verna nunca perdonará al asesino de su hermano. Si Bernie fuera asesinado por la banda de Caspar, aunque fuera a través de un soplo de Reagan, éste sabe que podría engatusar a Verna para aparecer como inocente, pero nunca si él mismo es el ejecutor. Esta, y no la piedad, es la razón de que perdone la vida a Bernie, corriendo con ello un grave riesgo al ponerse en las manos de un impresentable como ese.

No es ocioso recordar aquí que Reagan se pasa la película jugando (cartas, carreras de caballos) y perdiendo. Su mala racha continúa con Bernie: al día siguiente se presenta en su casa, lleno de rencor por haberse rebajado miserablemente en el bosque y chantajeando a Reagan para que mate a Caspar en 48 horas, tras la cuales dejará de esconderse y dejará a Reagan a los pies de los caballos(y del Danés). En ese momento, Reagan comprende que ha perdido esa apuesta y por ello trata de cortar las pérdidas: trata de sorprender a Bernie en el rellano de su edificio para matarlo, pero Bernie lo adivina y lo derriba. En este momento es cuando Reagan renuncia a Verna, puesto que sabe que es inevitable matar a Bernie, no sólo para cubrirse ante Caspar y el Danés, sino ante el propio Bernie, al que al salvar ha convertido en su enemigo.

El Danés no es tonto, y escucha el rumor de que Bernie está vivo. Conociendo la relación de Reagan con Verna, sabiendo que éste tiene una razón para perdonar la vida a Bernie, lleva a Tom al bosque a "encontrar un cadáver putrefacto o a dejar uno fresco". Evidentemente Reagan sabe que no hallarán nada, de ahí el vómito ante su inminente muerte. Sin embargo ante la sorpresa de todos,
hay un cadáver, que luego sabremos pertenece a Mink, de complexión similar a la de Bernie, y desfigurado por un tiro en la cara. La razón para que Bernie mate a Mink y coloque el cadáver me parece lo más frágil del guión, pero aún así se sostiene: Bernie mata a Mink dado que éste duda si chivarse al Danés, su otro amante; una vez muerto Mink, Bernie sospecha que El Danés puede no fiarse de Reagan y decide utilizar el cuerpo como seguro de su chantaje, para evitar que se carguen a Reagan antes de que este mate a Caspar.

En cualquier caso, a Reagan le viene a ver la Virgen, y recupera la parte principal de su plan original: enfrentar a Caspar y El Danés, lo que logra, provocando que el primero mate al segundo. Después de eso, cita a Caspar y Bernie en su casa a la misma hora para que se maten entre ellos. El superviviente es Bernie. Entonces, Reagan lo convence para que le deje su pistola para preparar la escena, indicándole que le cargarán el muerto al Danés (que Bernie no sabe que ha muerto). Pero la idea de Tom es preparar un escenario en que el que parezca que Bernie y Caspar se han matado entre ellos. Al darse cuenta, Bernie comienza de nuevo a suplicar, diciendo a Reagan que "Mire en su corazón". Reagan responde "¿Qué corazón?" y lo ejecuta.

Reagan, como dijimos antes, ha renunciado a Vera (y a su corazón) al darse cuenta del error cometido al no matar a Bernie. Por eso, la única parte de su plan que no se cumple es llevarse a Vera consigo, pese a lo cual se marcha, sabiendo que no podría volver a trabajar con Leo si este se casa con Verna. Su plan tenía dos motivaciones: su lealtad a Leo y su amor por Verna. ¿Ha elegido a Leo?¿Podía elegir?. Lo único que queda claro es que debajo de su sombrero, Tom llora por todo lo que ha perdido.


Todo este tocho es sólo una posible interpretación del guión; aqui hay otra completamente diferente (en inglés) que dice que Tom está enamorado de Leo. Y esto es sólo la primera capa del guión: sobre la simbología del sombrero en la película se podría escribir un libro. Por eso, por los gemelos italianos, por el grito de Drop Johnson y por tantas otras cosas, "Muerte entre las flores" merece figurar como la cumbre de los hermanos Coen y como una obra maestra del cine.

miércoles, 24 de junio de 2009

Pues a mi me gusta!!! - 2.- Jungla de cristal: La venganza

Con el género de acción ha ocurrido algo gracioso: la crítica parece haber pasado sin solución de continuidad de detestarlo a añorarlo. Parece que en algún momento todos se fueron a la cama despreciando al Governator y todo lo que representaba y al día siguiente se despertaron echando de menos a McTiernan, Donner... qué digo, hasta al primer Renny Harlin!!! Puede que en el fondo a gran parte de esos críticos les divirtieran esas películas pero les diera verguenza decirlo mientras estuvieran de moda, pero ahora que el género agoniza les parece seguro y hasta avant la garde. O puede que fueran los marcianos.

Sea como fuere, hoy en día no está mal visto alabar "Jungla de Cristal", lo que me parece bien, obviamente. De hecho, tengo un especial cariño a esa película, dado que las tres primeras películas que fui a ver con mis amigos (es decir, sin mis padres/abuelos/etc) fueron "Arma letal", "Robocop" y la primera Jungla. Con esos principios, ¿a quién puede extrañar mi cariño por el cine de acción?
Pero de lo que trata esta sección no es de dar cera/pulir cera a películas con un cierto grado de reconocimiento, sino todo lo contrario, por lo que dedicaré esta entrada a defender que la mejor película de la saga es la tercera: "Die Hard: With a vengeance" (Pequeña digresión: !qué difíciles de traducir son los títulos de esta tetralogía¡. Lo más cercano a la traducción literal que se me ocurre sería "Difícil de matar", "Difícil de matar 2: más difícil de matar", "Difícil de matar: A lo bestia" y "Vive libre o muere (difícilmente)". En serio, dicen eso. O sea que estaremos de acuerdo que en este caso el Traductor Loco tenía razón)

"Jungla de cristal: La venganza" (a partir de ahora, la Jungla 3) marcó el regreso a la franquicia de John McTiernan después de siete años, aunque con un solo film entre medias, la simpática "La jungla 2" de Renny Harlin. Algún crítico incluso aventuró que esta vuelta significaba un castigo del estudio por el estruendoso fracaso comercial de "El último gran héroe" (película que algún día pasará por aquí, vaya que sí). O sea, que si mañana dirijo una película que hace perder millones de $ a mis productores, estos optarán por no partirme las piernas, sino encargarme otra película que cueste millones de $ para que aprenda. Vale. En cualquier caso, se optó por rescatar únicamente a Bruce Willis de los actores de las anteriores películas y rodearlo de un reparto repleto de secundarios familiares para los seguidores del cine de los noventa, como Graham Greene o Collen Camp, y de dos incorporaciones de impacto: Samuel L. Jackson, recién salido de "Pulp fiction", como Zeus Carver, el involuntario compañero de aventuras de McLane, y Jeremy Irons como Simon Gruber, el villano de la función. Esta renovación no se quedó en el reparto, sino que el personaje de John McLane presentó una importante renovación. Del amante marido y padre de las dos primeras, cuya única preocupación es el bienestar de su familia, pasamos al divorciado borracho y de vuelta de todo, como se muestra en la ejemplar primera escena (ejemplar por como se presenta un protagonista, una situación de partida y unos personajes secundarios en cuestión de minutos, narrando con el diálogo, los encuadres, los gestos de los actores algo que otro director hubiera necesitado cinco minutos de metraje y un cartelito de "Dos años después" para narrar). McLane es ahora perseguido por su pasado, pues un terrorista que ha colocado bombas por toda Nueva York exige que protagonice una peligrosa gymkana por toda la ciudad, cuya primera prueba es que se pasee por Harlem vestido únicamente con un cartel que dice "Odio a los negros".


Evidentemente, como ya sabemos que la Jungla es un género codificado en sí mismo, los terroristas nunca son terroristas sino ladrones, con un plan para robar la Reserva Federal utilizando el puteo de McLane como cortina de humo (literalmente); lo que no esperan es que McLane les chafe el plan (¿de veras?, o sea, eres un Maestro del Crimen que planeas durante años tu Golpe Definitivo... ¿y quieres que McLane esté en tu hemisferio cuando lo hagas? Mal karma). En fin, quien busque realismo que siga buscando, esto es diversión de la buena. Y, atención, tiene un SUBTEXTO impresionante (y en este momento es cuando los colegas que están leyendo esto y han sufrido mis idas de olla ponen los ojos en blanco): John McLane es EL MALO DE LA PELÍCULA.

No, no he fumado nada y tampoco te voy a dar. En la película, Simon Gruber (Irons) quiere robar las reservas de oro del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, unos 140.ooo millones de dólares de nada. Además de asegurar la jubilación, este robo causaría el inmediato desplome de la economía mundial (como lo de ahora, pero fast forward), acabando de un plumazo con el sistema capitalista. Ergo, Simon no es un ladrón, es un revolucionario. En cuanto a McLane, además de un miembro de las Fuerzas de Seguridad del Estado, es un reaccionario, como muestra su comentario en una de las escenas de la película ("-Quien es el 42º presidente de EEUU? - Hillary Clinton!!"), además del salvajismo mostrado a lo largo de la película (mata en pantalla a 13 personas, una de ellas mientras se rendía, mientras que la banda de Gruber sólo mata a 2, siendo además reprendidos por ello los asesinos. Datos aquí: efectivamente, existe una web dedicada a contar los muertos de las pelis de acción. Adoro Internet). Por lo tanto, tenemos a un revolucionario que pretende dar un golpe lo más incruento posible para destruir la economía capitalista enfrentado a un oficial del orden fascistoide, borrachín y aficionado a disparar primero y destripar después... de nuevo, ¿quién es el malo?

Por supuesto, todo esto pueden ser desvaríos, pero cosas más raras se han escrito sobre otras películas más artísticas sin que nadie haya pestañeado, así que reclamo mi derecho a la interpretación libre de los blockbusters. En cualquier caso, esta es una película de la que se disfruta cada visionado y que hace desear que McLane solucione sus problemas legales y siga haciendo películas (preferentemente en el lugar de McG o Michael Bay, que es tan simpático como personaje cómico como horripilante dirigiendo escenas de acción). Yippie ki-yay, motherfuckers.

Pues a mí me gusta!!! - 1.- Love actually

Iniciamos este blog, en el que hablaremos principalmente de cine, televisión, cómics, música y el resto de cosas que hacen la vida interesante (o sea, furbo y drojas) con una sección que pretendo que tenga continuidad porque me permitirá desahogarme en condiciones (y esa es una de las principales razones por las que se escribe un blog).



"Pues a mi me gusta!!!" presentará películas a reivindicar, pero desde una óptica diferente a lo habitual en este tipo de reivindicaciones. Es mejor definirlo desde una óptica negativa: NO voy a hablar de películas comunmente valoradas y estimadas (p.e., claro que me gusta Clint Eastwood, pero este no es su lugar); tampoco voy a hablar de desconocidas películas procedentes de países que no sabemos situar en el mapa (y a ese que ha esbozado una sonrisa de suficiencia que me situe en el mapa la República de Kiribati, por listillo), puesto que existen foros en Internet que pueden y saben llenar ese hueco mucho mejor de lo que yo podría hacerlo; y por esa misma razón tampoco voy a dedicarme a lo que desde el inimitable blog de Vicisitud y sordidez llaman cine colonoscópico, ya que parece que hoy en día se gastan más bits en defender a Joe D´Amato y Jess Franco que en recordar a Ingmar Bergman o a Preston Sturges (y me parece bien: necesitan hasta el último de esos bits...)

Entonces, dirá el paciente lector, de que c%&$ vas a hablar? Pues de películas que todo el mundo conoce pero que a nadie le gustan. Por supuesto, a nadie salvo a mí. El gran Tomás Fernández Valentí (esto sí que es un blog y no lo que estás leyendo) comentaba en una entrevista hace años que le gustaría que alguien reivindicara el cine de, pongamos, Michael Bay ofreciendo análisis y argumentos para revitalizar la crítica cinematográfica (al menos eso entendí...). La cuestión es que hoy en día está bastante mejor visto reivindicar las películas de Asylum y hasta "Manos: Hands of Fate" que cualquier peli de Jason Statham o Hugh Grant. Y eso no puede ser.

Para el atento lector estos dos nombres son una pista de por donde irán los tiros: efectivamente, el cine de acción y la comedia romántica camparán por sus respetos en esta sección. Sé que el cine fantástico y de terror también tienen bastante que rescatar, pero para eso está Fangoria y similares analizando por qué es mejor Jason VII que Jason V (sí, analizan, muerte a muerte, y puedo asegurar que es mucho más divertido que ver la película en sí) o cual es el mejor desmembramiento de Saw y secuelas.

Basta de prolegómenos. Para abrir esta sección, qué mejor que una película que ningún crítico con autoestima podría tomar en serio: "Love actually"


A mí me gusta "Love actually". Es más, la he visto varias veces y me sigue gustando. He visto la media hora de escenas eliminadas y creo que la mejoran, y estoy convencido que si las hubieran mantenido tendríamos en nuestras manos la rom-com definitiva: tres horas de gente guapísima enamorándose, sufriendo, llorando y terminando felices para siempre jamás. Con niños. Y nieve. Y canciones navideñas. Y "God only knows" sonando antes de los títulos de crédito.

O sea, la automática destrucción de la reputación de cualquiera que admitiese que le había gustado.

Veamos: antes de entrar en el análisis de la película en sí, cabe una reflexión sobre el por qué de la pésima reputación de la comedia romántica. ¿Se han estrenado malas, muy malas, espantosas películas de este género? Claro que sí. Muchas. Y el género que pueda lanzar la primera piedra que lo haga. Comedia, drama, thriller, terror, etc, etc. O sea que no va a ser esto. Otra razón podría ser que nos hallamos ante un género altamente codificado, que no quiere decir que sólo se emita en el Plus, sino que tiene muchas reglas que deben cumplirse. En el caso de la comedia romántica los protagonistas deben ser guapos, pero no avasalladoramente guapos; debe haber una estructura en tres partes (chico conoce chica / mundo se interpone entre chico y chica / mundo es destruído si es menester para que chico y chica acaben juntos); existe un rango determinado de secundarios (amigo nerd/ligón/vituperable del chico; amiga cínica/pava/bonachona de la chica); los padres son opcionales, aunque si hay un ganador/a de un Oscar con necesidad de un cheque se hace sitio; los niños son bienvenidos; el/la rival deben ser más mezquinos/superficiales/sosos que el/la protagonista, pero también deben tener su corazoncito... y, sobre todo, parafraseando a esa otra lista de obligaciones escrita en piedra, todas estas reglas se resumen en dos: todo el mundo es bueno y todo debe acabar bien.

Creo que en estas dos reglas se resume lo que la gente odia de las comedias románticas: su previsibilidad y su creencia en la bondad de la raza humana. Y me atrevería a afirmar que sobre todo es la segunda, pues previsibles son la mayoría de las películas. Así que llegamos a una primera conclusión: la mala reputación de las rom-com procede de su creencia en la bondad de la humanidad. Y no es moco de pavo, la verdad. Basta con el simple gesto de encender un televisor en cualquier lugar del mundo a cualquier hora y en cinco minutos tendrás suficientes razones para negar la bondad y hasta el derecho a la existencia de la humanidad. Pero reflexionemos un minuto: ¿de verdad es todo tan malo? ¿No hay nada que se salve? ¿No conoces ninguna buena persona? ¿No ves "Pocoyó"? Pues eso, que hay de todo en todas partes, y las comedias románticas eligen mostrar la cara más amable.

En este sentido, "Love actually" es ejemplarmente honesta (NOTA: aquí comenza la etapa-SPOILER del post, así que recomiendo a quien no haya visto la película que la vea inmediatamente para luego seguir leyendo)



(No digáis que no avisé)



(¿Ya?, vale, seguimos)



Comienza con una secuencia que muestra la zona de llegadas de un aeropuerto mientras una voz en off dice que, cada vez que duda de la bondad de la raza humana, conduce hasta un aeropuerto para ver los reencuentros de la gente: padres e hijos, maridos y mujeres, viejos amigos... todos abrazándose, llorando, riendo... vamos, amol por todas partes. Y, citando la canción de la banda sonora de "Cuatro bodas y un funeral", dice "Y es que el amor, de hecho, está en todas partes" ("Love, actually, is all around"). Toda una declaración de intenciones.

Y la película va de eso, de amor. Amor inesperado, amor correspondido, amor imposible, primer amos, amor truncado, amor traicionado, amor fraternal, amor carnal, amor pornográfico (aunque no demasiado), amor hasta en la sopa. Dado que tenemos nueve historias, el director se permite fallar parcialmente una de las reglas de titanio: no todas las historias acaban bien. Aunque, para compensar estas amarguras y el resto de finales tristes de la historia del cine tenemos la historia del paleto inglés que no se come una rosca y decide emigrar al Medio Oeste americano...!!! en busca de sexo!!!. Lo que allí encuentra hay que verlo para creerlo (o sea, para no creerlo), pero todo espectador masculino que no haya tenido una fantasía similar a los catorce años miente, y sabe que miente.

Como todo film similar, no todas las historias tienen el mismo nivel: a mí, particularmente, me chirría la historia del Presidente (la política no tiene sitio en una comedia romántica si no tienes a Aaron Sorkin para que te la escriba) y la historia de los figurantes porno me deja frío, pero el resto de historias oscilan entre lo tierno y lo conmovedor. Bill Nighy se gana su actual estatus de secundario cheque de oro en Hollywood con ese viejo cock rocker que todo lo desprecia y que sólo ama a su manager porque es el único que ha creído en él; Colin Firth demuestra por qué es el marido perfecto para todas las británicas de bien; Andrew Lincoln realiza ante Keira Knightley el gesto que todos los geeks hubiéramos querido hacer ante nuestra adolescente musa. Y luego está Liam Neeson.

Liam Neeson es un hombre. Y el resto del mundo no. Que tamaño dechado de masculinidad, ejemplo a seguir por todos los que leímos alguna vez a Hemingway y nos lo creímos, aparezca en una película como esta es ya un hecho de interés. Y la borda. Aquí debemos entrar en el peliagudo asunto de las escenas eliminadas. Se cortó por todas partes, pero lo que más se cortó fue la historia de este viudo destrozado que debe cuidar de su pequeño hijastro y ayudarle a conseguir su preadolescente amor. Y nada de lo que se cortó debió cortarse: una escena en particular es un ejemplo de comedia pura que rara vez se ve. El deprimido viudo Neeson recibe un papel de su progre hermana con direcciones de Internet donde puede encontrar desnudos de Claudia Schiffer, porque sabe que eso lo animará (sic). Con su hijo encerrado en su cuarto deprimido (luego veremos por qué), el lúbrico viudo comienza a buscar. Como no puede ser de otra manera para un neófito en estas lides lúdico-festivas, a los treinta segundos comienzan a saltar pop-ups de lo más explícito y guarro. En ese momento, suena el timbre de la puerta. Pánico. Tapo el ordenador con mi chaqueta para evitar el ridículo. Abro la puerta y quién es?. Pues el padre de mi fallecida esposa, por supuesto. Y quiere enseñarme webs de campos de golf. Y ve mi pantalla llena de ventanas con ofertas de bestialismo y demás. Y qué hago? Pues lo obvio: soborno a mi hijastro para que no rechiste cuando le eche la culpa. Y gracias a eso, mi hijastro me cuenta al fin la razón de su encierro, que no es la tristeza por la muerte de su madre: se ha enamorado, y ha convertido su cuarto en un altar de la comedia romántica para encontrar inspiración.

Esta película no tiene piel. Se autodestruye ante la menor muestra de cinismo. Y es comprensible que muchísma gente la encuentre risible y ridícula. Pero también -ay!- existen muchos que la adoran y no quieren, o no se atreven a admitirlo. Porque admitir que te gusta "Love actually" es desnudarte. Y ese miedo llega hasta la película: dos de las escenas eliminadas comienzan con un zoom sobre un poster de una organización tipo Oxfam que muestra escenas de miseria en Africa; el zoom literalmente penetra en el poster y nos muestra las personas que aparecen en la foto hablando, pero no sobre su miseria, sino hablando de amor. Si hubieran mantenido estas escenas se hubiera montado la de Dios. Y sin embargo puedes hacer una película que muestre que la culpa de la miseria en Africa es de su corrupta clase dirigente y no pasa nada, "es sólo una película".

Richard Curtis tiene fama de blando y tontorrón. Cualquiera que haya visto "La víbora negra" puede negar esta afirmación (y muchos que la hayan visto dirán "¿Cómo?¿Este tío escribió "Black adder"?"). Pero ha elegido pasear por el lado amable. Y eso, artísticamente, es mucho más arriesgado que pasear por el lado salvaje. Económicamente no, claro, y es lícito pensar que este hombre se ha vendido. Yo sólo puedo decir que escuchando sus comentarios sobre la película, y viendo la propia película, creo sinceramente que cree en lo que hace.

En fin, que espero haber convencido a alguien para que vea esta película, y sobre todo espero haber convencido a los que les gustó pero no se atrevían a decirlo. No tengáis miedo. Somos muchos.

Seguiremos. Con una venganza.